lunes, 18 de febrero de 2008

Busca palabras/Sopa de letras


Hace dos semanas y unos días que regresé a Santiago. Me gustaría poder definir exactamente que siento con este regreso, pero no puedo. Algo en mí me dice que no debí volver. Desde que llegué no he hecho nada productivo. Me cuesta mucho levantarme en las mañanas y encontrarme ahí en mi cama, en el departamento, sola… Me hacen mucha falta mis sobrinos, mis hermanos, mi padre, pero sobretodo me hace falta mi mamá.
Comencé a escribir con muchas ganas de expresar lo que siento, pero llegó a mí el maldito ¿para qué? Y todo lo que tenía que decir se esfumó. Tengo en la cabeza una sopa de letras. Miles de letras en filas, verticales, horizontales, pero sin organización, sin ningún sentido a la simple vista. Están esperando que llegue alguien, o algo, con el marcador amarillo fosforescente, y encuentre algún sentido y con una simple marca fosforescente me indique que dicen esas letras.

He estado esperando todo el día una llamada que no llegó, quizás sea mejor. Let him live… Let him be… Ojalá lo esté pasando muy bien dedicándole a ella todos los pensamientos que ella, y no yo, se merece.

Dejé de escribir por unas horas y en ese momento llegó la llamada que esperaba, a veces menosprecio el poder que tengo sobre algunos. Malo o bueno, lo tengo... No sé, a veces creo que haber estudiado teatro, me ha creado el complejo de siempre representar. Siento una satisfacción algo morbosa y masoquista, pero satisfacción, al crear dramas en momentos específicos de mis días. Pa’ variar el día de la llamada no fue la excepción. Soy tan buena actriz, que hasta yo misma me creo el cuento dramático que represento. Pero en fin, el drama, en esos momentos le pone un poquito de color a algunas situaciones que no lo tienen y lo necesitan.

Y me fui a la playa, una semana y me quemé más que cuando estuve en Puerto Rico por casi dos meses. Estoy negra, usualmente me gusta estar bronceada, pero este bronceado es por pedacitos, no me quemé pareja y parece que padezco de vitiligo. En la playa, pasaron cosas muy lindas, mucha conversación con alguien que realmente la necesitaba. Me malcriaron y consintieron muchísimo, craso error, el complejo de princesa se agigantó. No he comido desde que llegué por no cocinar. Puede que en un futuro no muy lejano me arrepienta de las cosas que dije e hice en la playa, pero por ahora no hay remorse. Es bueno confiar en las decisiones que uno toma… es sano…

Tengo la cabeza un tanto cagá, como se dice en Chile. Preguntando por preguntar, ¿han estado en una tienda de dulces donde puedes tener los dulces que te dé la gana? Y pruebas de todos, chicles, chocolates… Pero la primera paleta que lamiste fue la más que te gustó y esa no la puedes tener… ¡Qué lata! Tener todo lo que no se quiere y no tener lo que se quiere. Why? Why? Why? Yo sola entiendo la metaforón y nada tiene que ver con mi complejo de princesa.

Me he muerto de la risa leyendo El evangelio según Jesucristo de José Saramago. No tengo idea si lo escribió para que fuera gracioso, pero yo la estoy pasando muy bien leyéndolo. Me encantó la descripción, de la “Inmaculada Concepción”. Algo que pondría contentas mis abuelas es el hecho de que me han dado ganas de comprarme una Biblia a lo católico. Pero se morirían nuevamente y de rabia esta vez, si les cuento que la quiero leer para convencerme más aún de… bueno, los que me conocen ya saben que no creo… En agenda para leer Rayuela, El principito (si los he leído los dos pero quiero volver a hacerlo), unos cuentos de Cortazar, otros de Abelardo Díaz Alfaro ah! y la Biblia…

Anyway, la sopa de letras in my head, it’s still lingering! La wea fome! Tengo un cuento comenzado me gusta mucho, y sé que quiero decir, pero se me está escapando de las manos y no se como devolverlo a donde quiero que esté.

Ahora el sueño me gana… como siempre…

CONTINUARÁ…

1 comentario:

Alacran... es mi naturaleza... dijo...

No todo ha de ser tan malo, mira bien y encontraras tambien gente buena.

Un abrazo